¿Arte sonoro…?

Cuando hablamos de arte sonoro surge en nuestras mentes una idea vaga e indefinida sobre una realidad intangible que nos resulta a la vez próxima y desconocida.
El arte sonoro nos lleva a un terreno de contornos imprecisos en el que tienen cabida conceptos como experimentación, improvisación, performance, instantaneidad, expresión. Esta disciplina trata de ahondar en el poder y versatilidad del sonido como herramienta de expresión artística; pero si la música ya es un arte, ¿qué es entonces el arte sonoro? El atractivo reside en las potencialidades mismas del arte sonoro, que juega a enfrentar, expandir y entremezclar los límites tradicionalmente asignados (de un modo a veces artificial) a las diferentes ramas artísticas. ¿Es la poesía sonora literatura o música? ¿Es una performance de sonido artes plásticas o escénicas?
Aunque no pretendemos dar ahora respuesta a estos interrogantes, sí aspiramos a iniciar la estela de una labor introspectiva personal que os lleve a indagar y cuestionaros los conceptos estancos a los que estamos acostumbrados en el sector del arte. Y esto es precisamente lo que ha llevado a muchos músicos y artistas a adentrarse en el arte sonoro, a replantearse las reglas prefijadas, los límites de lo posible, la capacidad intrínseca al sonido como tal.
Os invitamos a todos a acompañarnos en esta apasionante travesía que hoy queremos iniciar con vosotros.